¿Cómo es posible que haya una escuela de buceo en Alcalá de Henares?

Todo comenzó en un gimnasio. En el Gimnasio Sanabria donde se convirtió en una de las actividades más demandas. “La gente cada vez se interesaba por este deporte, y no solo por bucear, sino porque tenías una excusa para viajar”.

El primer grupo que sacaron, realizó su primer viaje a Denia concretamente a la zona de Jávea en 1996. “Empezamos con inmersiones subacuáticas, pero después de aquel viaje la gente quería formarse”, cuenta Jesús David.

Sin embargo, en aquella época todavía no eran ninguno de ellos instructores y fue cuando la demanda del buceo en Alcalá empezó a crecer hasta el punto en el que dijeron “aquí hay que hacer algo”. De esta manera, nació 'Buceo Alcalá', que dejó de ser una actividad más del gimnasio.

Jesús David, fundador de la escuela e instructor de más de 2000 alumnos

“No puedo decir que me gusta el buceo porque no es así, yo lo amo. Es muy distinto cuando te gusta algo a cuando amas algo”, así describe Jesús David su pasión por el buceo. Él fue, el único fundador de 'Buceo Alcalá', pero actualmente cuenta con varios instructores, lo que se conoce como “dive master”, que él mismo ha formado.

De esta manera, ahora cuenta con más ayuda para poder tener varios cursos de formación a la vez. “La temporada alta es en verano, donde damos cursos de formación, aunque en invierno la demanda es igual o mayor, gracias a nuestros cursos de mantenimiento de equipo, formación y enriquecimiento”.

Los valores, algo fundamental

Algo que caracteriza a 'Buceo Alcalá', son sus valores:

Primero, con las labores sociales que hace tratando con niños con discapacidad intelectual, además de tener jornadas para niños con familias desestructuradas en colaboración con la fundación “Soñar despierto”.

“Bucear es una sensación increíble que se puede comparar con volar debajo del agua. Ahora imagínate como se tiene que sentir debajo del agua, una persona con discapacidad cuyo movimiento se ve limitadísimo en el día a día”.

Aunque parezca increíble, a pesar de tener discapacidad, realizan exactamente la misma actividad que todos, solo tienen una limitación en cuanto a profundidad y en algunos casos necesitan estar acompañados.

Segundo, como escuela participan en el proyecto internacional “Aware” y en varias limpiezas de costas anualmente. Esto hace que sus alumnos tengan muy bien interiorizado los valores de cuidados del mar y medio ambiente.

“El hecho de ver lo que sucede debajo del agua, hace que puedas detectar los enormes problemas que hay. Por ejemplo, si yo con 30 años que llevo buceando observo que ya no existe una especie de tortuga en un lugar que antes si, veo que el problema es enorme”, explica preocupado Jesús David.

Y tercero, la preocupación por la gente que da de comer a los animales marinos, ya que, según Jesús David, “altera claramente la evolución de las especies”. Atiza a los que lo hacen y deja claro que, aunque haya gente que les critique, “nosotros no tocamos nada ni alteramos nada”.

Sin embargo, lanza un mensaje esperanzador y afirma que cada vez son menos los que lo hacen ya que hay más formación en los centros.

Objetivo: desmitificar que es un deporte para pocos

En cuanto a si el hecho de que sea un deporte que no practica una enorme cantidad de gente, es debido entre otras cosas a que puede resultar caro, Jesús David deja claro que la mayoría de los deportes son más caros. “Un equipo de buceo ronda entre los 40-80 euros, por lo que no es para nada inaccesible. Además, siempre está la opción de alquilar el equipamiento”, sentencia el fundador de 'Buceo Alcalá'.

El buceo es un deporte que se encuentra en “un crecimiento constante” y como dice Jesús, “rara es la persona que no lo ha practicado o tiene intención de hacerlo”.

Organizadores de viajes exóticos

El buceo, parece ser sinónimo de viajar, y eso es una de las cosas que mas hacen en 'Buceo Alcalá', sobre todo a lugares exóticos como Filipinas o Maldivas. Este último es el favorito de Jesús David por la cantidad de especies que hay y la pureza del agua unida a su temperatura.

A pesar de ser viajes organizados para ir a bucear, algo que les caracteriza también, es el sentimiento de familia que se crea al conocerse casi todos entre ellos, es por ello por lo que la escuela no impide a nadie viajar, aunque lo haga sin intención de bucear, ya que “lo más importante es crear un ambiente bonito y familiar”, afirma Jesús David.

Aunque vaya gente que en principio no tiene intención de practicar el deporte, “el hecho de ver como lo hace el resto hace normalmente que les genere curiosidad y acaben haciéndolo”.