DANA política

El Gobierno se ha impuesto una tregua en la confrontación política ante la devastación provocada por la DANA, que se ha ensañado con la Comunidad Valenciana, pero antes de ello se negó a aplazar el Pleno del Congreso en el que se debía ratificar el decreto con el que toma el control absoluto de RTVE, laminando a la oposición.

Se le notaron tanto las prisas al Gobierno, al PSOE y a sus socios de legislatura, algunos de los cuales tendrán por primera vez representación en el Consejo de Administración del ente público, que se rozó la impudicia, con el hemiciclo medio vacío por el plantón de los diputados del PP, de Vox… y también de Compromís, que no entendían por qué debía seguir la actividad normal del Congreso mientras a 300 kilómetros se trabajaba contrarreloj para buscar supervivientes.

El Gobierno ya tiene lo que quiere, el control total de la televisión pública, pero eso lo podía haber conseguido igualmente dentro de una semana, porque tiene el apoyo de sus socios, lo que hace todavía más incomprensible la actitud de la Mesa del Congreso validando la celebración del Pleno. La Cámara Baja se debe a los ciudadanos que eligen a sus representantes y este miércoles les falló por una razón espuria.

Tiempo habrá de profundizar en lo sucedido en la Comunidad Valenciana y de buscar responsables, si los hay; en analizar si la alerta de la Generalitat a los ciudadanos llegó tarde o no; si influyó de alguna manera que hace un año fuera suprimida la Unidad Valenciana de Emergencias… porque antes hay que socorrer a las víctimas y buscar a los desaparecidos.

La confrontación política no debe tener cabida en estos momentos de dolor, por ello es aún más inaudito que el Congreso dedicara varias horas del miércoles a convalidar el decreto de RTVE por imposición del Gobierno.

Pero el drama provocado por la DANA no debe hacer que pasen desapercibidos algunos de los perfiles elegidos por el Gobierno y sus socios para dirigir RTVE y que este miércoles avaló el Congreso: una cantautora socialista, una ex asesora de prensa de Zapatero, un ex responsable de comunicación de ERC, una ex diputada de los Comuns, una ex consejera de Educación en Navarra nombrada por el PNV, el comunicador de cabecera de CiU (ahora Junts), un integrante de las listas de Podemos en Madrid en 2019…

Una forma muy curiosa de luchar contra los bulos y los seudomedios.