Europa, blanco de críticas en la recta final de la cumbre del clima de Bakú

La cumbre del clima de Bakú entra en su recta final con todos los frentes abiertos, las negociaciones atascadas en cuestiones clave y un embrollo geopolítico cada vez más grande. Este miércoles, en el ecuador de la semana decisiva de este encuentro y a solo dos días para el cierre oficial de las negociaciones, la falta de un consenso sobre quién y como debe movilizar los fondos para la acción climática en el mundo lo está bloqueando todo. Analistas, expertos en diplomacia climática y colectivos ecologistas se muestran especialmente críticos con el rol de Europa en estas discusiones ya que, hasta ahora, los Veintisiete solo han dicho que aspiran a un acuerdo financiero lo "más ambicioso posible" pero aún no han proporcionado ninguna cifra sobre cuánto dinero están dispuestos a poner sobre la mesa para la causa climática.

"Europa, como uno de los grandes emisores históricos de gases de efecto invernadero, debería estar liderando la acción climática y no hacerse a un lado esperando que los demás actúen", critican desde la Climate Action Network, una plataforma que agrupa a más de 1.900 entidades ecologistas de todo el mundo y que desde hace más de 25 años sigue en primera línea las negociaciones de la cumbre del clima. En una protesta organizada este miércoles, la entidad ha criticado el discurso de la Unión Europea durante este encuentro ya que, según denuncian los activistas, "en vez de presentar cifras o propuestas concretas solo están proporcionando un silencio ensordecedor".

"Europa, como uno de los grandes emisores históricos de gases de efecto invernadero, debería estar liderando la acción climática y no echarse a un lado"

Según ha denunciado Emilia Runeberg, experta en financiación climática de Climate Action Network Europe, "si de verdad Europa quiere tomar la iniciativa, debe actuar cuanto antes" y desatascar el embrollo de las negociaciones. "El mundo está observando y el tiempo se acaba", ha afirmado Runenberg en una protesta organizada este miércoles. En esta misma línea se ha posicionado Chiara Martinelli, directora de esta entidad, quien ha argumentado que Europa no se puede limitar a pedir a los demás países "más ambición" en la lucha climática sin antes dar ejemplo de ello.

Los negociadores europeos defienden que los demás países también deben asumir su "responsabilidad histórica" y aumentar sus compromisos en financiación y mitigación

Los negociadores europeos, por su parte, defienden su estrategia de negociación en esta cumbre. Sobre todo en un momento en que, a diferencia de otros años, la llegada de Donald Trump a la presidencia de Estados Unidos hace que Europa tema quedarse sola en los grandes compromisos climáticos mundiales.

Hasta ahora, de hecho, se estima que los Veintisiete han aportado cerca de un tercio de los 100.000 millones de dólares anuales movilizados para ayudar a los países del sur global a hacer frente a los estragos climáticos y, aunque existe un compromiso unánime para aumentar su contribución, temen asumir una carga demasiado grande casi en solitario. En una rueda de prensa celebrada este miércoles, el comisario climático europeo Wopke Hoekstra ha afirmado que los demás países también deben dar un paso adelante y "asumir su responsabilidad histórica" en esta crisis de alcance global.

En espera de los borradores

Todo apunta a que los debates irán a más en las próximas horas. Fuentes cercanas a las negociaciones afirman que entre esta medianoche en Bakú y la próxima madrugada podrían verse los primeros borradores sólidos de los cuatro grandes bloques de negociación de esta cumbre: financiación climática, mitigación, adaptación y pérdidas y daños. Analistas y observadores coinciden al unísono que el atasco en el debate sobre los fondos está bloqueando el resto de negociaciones ya que "hasta que los países en vías de desarrollo no sepan de cuánto dinero disponen, no presentarán ninguna propuesta clara sobre cómo planean descarbonizar su economía o realizar cualquier otro proyecto climático", ha explicado Ana Mulio Álvarez, de la plataforma E3G, durante una rueda de prensa convocada este miércoles en Bakú.

Esta madrugada se espera la publicación de al menos cuatro borradores clave de esta cumbre, un punto de inflexión que podría agilizar los debates

Por ahora, todo apunta a que este jueves se publicarán los primeros borradores clave de esta cumbre. Después, los textos serán estudiados por los negociadores de cada país y, en algún momento, serán debatidos ante el plenario de Naciones Unidas. Aún no está claro qué pasará a partir de entonces, ya que todo depende de la evaluación que haga cada una de las partes sobre el resultado alcanzado. Sobre el papel, las discusiones deberían finalizar pronto y la cumbre debería clausurarse el viernes. Pero en estos momentos, la imagen de los negociadores preparándose para pasar la noche en las salas de trabajo no presagia un final ni plácido ni temprano para esta cumbre de Bakú.