Tras registrar seis peticiones de reuniones en la última semana, el comité de la huelga convocada por el sindicato AMYTS entre médicos de Familia y pediatras de los centros de salud, que emprende su octava semana, vuelve a sentarse este miércoles con la Consejería de Sanidad. Un ansiado encuentro para ver si, por fin, desencalla el conflicto sanitario que se vive en la región y que arrancó el pasado 21 de noviembre. Una ocasión para volver a encontrarse -la última reunión fallida fue el 11 de enero- tras numerosos desencuentros y después de la reciente puesta en marcha en la región de un proyecto piloto en los centros de salud para organizar las agendas de los facultativos que no convence al sindicato.

La pasada semana, la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, que ha criticado muchas veces el carácter "político" de la huelga de médicos en Madrid, tanto la de Atención Primaria como la que las urgencias extrahospitalarias, cifraba el seguimiento de los paros en un 1% de los sanitarios. En esa misma semana, la Consejería de Sanidad anunciaba la puesta en marcha, de manera progresiva, de un proyecto piloto en 22 centros de salud públicos para organizar las agendas de los facultativos.

De esta forma, según la Consejería, los médicos de familia dedicarán 10 minutos a cada paciente hasta llegar a un máximo de 34 al día, mientras que los pediatras podrán disponer de 15 minutos, hasta atender un máximo de 24 personas. A partir de ahí, se generará una bolsa nueva en cada centro para que otros profesionales de Atención Primaria puedan dar respuesta a ese exceso de demanda.

Los profesionales que absorban esta carga de trabajo recibirían un complemento específico en sus nóminas, pudiendo prolongar su jornada en turno contrario y hasta un máximo de 4 horas, con una retribución económica de 50 euros por hora, que podría llegar por tanto a los 200 euros diarios. Según la consejería, se atiende a así a una de las principales medidas tratadas con los representantes de los trabajadores en los últimos meses.

Un plan que no les convence

Las medidas no convencen en absoluto al comité de huelga. Durante estas semanas no han dejado de movilizarse. Encierros, concentraciones, marchas...Este mismo miércoles, como cada semana desde hace meses, vuelven a recorrer las calles del centro de la ciudad. De hecho, iniciarán su manifestación semanal a las 10.30, en la sede de la Consejería de Sanidad de la Calle Sagasta, la misma en la que luego se reunirán con representantes del departamento media hora después.

Como viene sucediendo en las últimas reuniones, todo puede suceder. Las posturas no pueden estar más encontradas. El comité de huelga considera que el consejero de Sanidad, Enrique Ruiz Escudero, publicitó "a bombo y platillo" el citado proyecto piloto en 22 centros de salud (hay más de 400, precisa AMYTS) para limitar las agendas y se pregunta: "¿Y si no hay voluntarios?, ¿qué sucederá con el paciente 35?. Muchas preguntas que la Consejería no nos ha respondido desde que en la segunda reunión (la de 7 horas) nos plantease esta medida", señala AMYTS.

Este lunes, tras recopilar información durante el fin de semana y esa misma jornada, el sindicato aseguraba que "el proyecto piloto no ha comenzado "y muchos profesionales desconocen cómo se organizarán". Es más, aseguran que muchos centros "no han tenido comunicación alguna". La iniciativa de la Consejería de Sanidad, que considera que así responde a las peticiones de los facultativos, será uno de los temas a considerar para poner fin a la huelga.

Hay que recordar que, precisamente con el objetivo de que el paro finalice, el comité de huelga pidió una intermediación de tres médicos independientes y de prestigio "para solucionar el conflicto y dar la máxima transparencia". una propuesta que fue denegada por la Consejería que siempre ha señalado que es un tema que se debe tratar "en el marco negociador, tal y como está introducido en la normativa".

Los facultativos madrileños reanudaron el 12 de enero la huelga indefinida -a la que están llamados 4.240 médicos de Familia y 720 pediatras de los 430 centros de salud de la Comunidad - que comenzaron el 21 de noviembre y que suspendieron durante las fiestas navideñas, tras el fracaso de las negociaciones. Reivindican, entre otras cuestiones, un mínimo de diez minutos por paciente, una limitación de las agendas y una mejora de las condiciones laborales.