Insuficiencia cardiaca: causas y síntomas de una enfermedad frecuente, tan mortal como algunos cánceres

“La insuficiencia cardiaca es una enfermedad grave que ocurre cuando el corazón es incapaz de bombear la sangre de forma adecuada y, por tanto, no consigue enviar el oxígeno y los nutrientes necesarios a todos los órganos del cuerpo”, explica el doctor Alejandro Recio, presidente de la Asociación de Insuficiencia Cardiaca de la Sociedad Española de Cardiología. 

Detrás de esta patología cardiaca hay diversas causas como:

• El infarto de miocardio
• La hipertensión
• Problemas en las válvulas del corazón
• Las miocardiopatías
• Las arritmias
• Tener factores de riesgo. 

Es muy importante conocer los síntomas de la insuficiencia cardíaca

No es una cuestión complicada conocerlos, porque como explica el doctor Andrés Íñiguez, presidente de la Fundación Española del Corazón, los síntomas de la insuficiencia cardiaca son claros: 

• Falta de aire.
• Cansancio.
• Tener palpitaciones.
• Hinchazón de pies y abdomen.
• Falta de apetito.
• Mareos. 

Y es muy importante porque, como advierte el presidente de la FEC:

• “La aparición de cualquiera de estas señales debe hacernos sospechar que padecemos este grave problema de corazón o que estamos teniendo una recaída, por lo que hay que consultar al médico”.

Por eso los especialistas en cardiología señalan la necesidad de conocer los síntomas de la insuficiencia cardiaca para poder identificarlos de forma temprana y poder diagnosticarla de forma precoz. Porque solo así se puede tratar a tiempo para mejorar la calidad de vida del paciente y a disminuir su riesgo de muerte. 

• Porque no debemos olvidar que la insuficiencia cardiaca es una enfermedad con una elevada mortalidad. De hecho, la supervivencia de los pacientes que la sufren se sitúa en torno al 50% a los cinco años del diagnóstico. Un porcentaje que iguala la mortalidad de esta patología a la de muchos cánceres. 

¿Cómo se diagnostica y se trata la insuficiencia cardiaca?

Tal y como señala el doctor Íñiguez cualquier señal de sospecha de que podamos estar sufriendo insuficiencia cardiaca nos debe hacer acudir a un cardiólogo.

Este especialista determinará si realmente sufrimos esta afección cardiaca, para lo que puede someter al paciente a distintas pruebas como:

• Electrocardiograma
• Ecocardiograma
• Análisis de sangre específicos
• Radiografía torácica. 

Una vez diagnosticada, la enfermedad puede ser tratada de diversas formas en función de la gravedad y de las características. Así, el paciente puede recibir:

• Tratamiento con medicamentos
• Implante de un marcapasos
• Un desfibrilador
• Incluso ser sometido a un trasplante de corazón. 

Las cifras de la insuficiencia cardiaca en España

Tal y como revelan los datos que maneja la Sociedad Española de Cardiología, en España hay 770.000 personas afectadas por insuficiencia cardiaca, lo que equivale al total de la población de provincias como Córdoba, Gipuzkoa o Girona.

En concreto, se estima que entre el 4,7% y el 6,8% de los mayores de 45 años padecen esta enfermedad, cifra que alcanza el 16% en los mayores de 75 años.

Y los niveles de mortalidad que causa esta enfermedad también llaman la atención porque según los últimos datos del Instituto Nacional de Estadística (INE):

• En 2022, 20.584 españoles fallecieron por insuficiencia cardiaca: 12.409 mujeres y 8.175 hombres. 

Además:

1. La insuficiencia cardiaca representa más del 25% de todos los ingresos por enfermedades cardiacas.
2. Uno de cada 10 ingresados por esta patología fallece antes del alta.
3. En un año, la mortalidad sube hasta el 20%
4. Y a los cinco años se sitúa en torno al 50%. 

El problema es que el número de pacientes con esta patología crece cada año, según indica el doctor Alejandro Recio: “el número de personas afectadas por insuficiencia cardiaca va en aumento debido fundamentalmente al incremento de la supervivencia de otras patologías, como el infarto de miocardio, y al envejecimiento de la población”. 

De hecho, como añade el especialista en cardiología:

• "Algunos estudios realizados en países de nuestro entorno sugieren que los ingresos por insuficiencia cardiaca aumentarán hasta en un 50% en los próximos 25 años”.