SUCESOS

La 'guerra de los niños': las bandas latinas de Madrid reclutan a menores de 9 años por ser inimputables

La última reyerta en Ciudad Lineal dejó ocho detenidos, cuatro de ellos de 14 años

"Estamos en época de revancha" advierten desde el Observatorio de Bandas Latinas

Detención de uno los 'coros' de los DDP más violentos y activos en Madrid / POLICÍA NACIONAL

David López Frías

3030. Si ha visto esa cifra pintada en alguna pared, debe saber que se está librando una guerra soterrada en ese lugar. Ese es el código con el que las bandas latinas expresan, en su jerga, que están en guerra. Madrid está siendo, ahora mismo, el escenario de una cruenta batalla por el control del territorio. Los contendientes son bandas latinas que reclutan a jóvenes principalmente latinoamericanos, pero también españoles o marroquíes, con el objetivo de aniquilar a sus rivales. Y, en todos los casos, los soldados son jóvenes. Cada vez más.

El último ejemplo ha tenido lugar esta misma semana en Ciudad Lineal. La Policía Nacional ha detenido a 8 personas que se estaban enfrentando en una batalla campal frente a la Clínica de la Fuensanta. Una reyerta con palos, botellas, piedras y objetos punzantes que acabó con el balance de 8 detenidos. Cuatro de ellos son menores de edad.

La pelea por el control de las calles de la capital ya no es entre Latin Kings y Ñetas; ahora se la disputan los Trinitarios y los DDP (Dominican Dont Play), que fueron los protagonistas de dicho incidente. Aunque hay un par de actores secundarios: son los Blood y los Forty Two, otras dos bandas emergentes que también aspiran a adueñarse de las calles. Todos ellos se caracterizan por ser cada vez más violentos y por usar a soldados cada vez más jóvenes.

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GUARDIA CIVIL

Manipulables

La Policía ha confirmado que el año de nacimiento de varios de los arrestados que trataban de huir en patinete el pasado martes es 2010. Es decir: niños de 14 años. ¿Por qué tan jóvenes? EL PERIÓDICO DE ESPAÑA ha hablado con fuentes policiales que han confirmado que hay dos grandes motivos: "El primero es que los captan directamente en los institutos. Mientras más pequeños, más manipulables son sus mentes", cuenta un agente.

La segunda razón es meramente logística: "Con menos de 14 años son inimputables. Hay casos de arrestos de críos de 11, 12 o 13 años a los que los líderes de sus bandas mandan a cometer delitos cada vez más graves". Delitos que generalmente tienen que ver con ataques a bandas rivales. Utilizan indistintamente armas blancas (principalmente machetes) y armas de fuego (generalmente pistolas de fogueo modificadas).

"Trinitarios y DDP son las bandas mayoritarias, pero las maras centroamericanas se están consolidando y los Latin Kings se están rearmando"

Observatorio de Bandas Latinas

"A esas edades, además de inimputables, también son más inconscientes. La entrada en una de estas bandas tiene sus ritos iniciáticos, que casi siempre consisten en agredir a un rival. Son agresiones graves. Suelen llevar armas blancas. Especialmente uno al que llaman 'bolomachete' o machete filipino, que es un cuchillo de grandes dimensiones, de hasta medio metro, que se utiliza para cortar malas hierbas y se puede adquirir en tiendas de bricolaje", explica esta misma fuente policial. Y si son detenidos, "no tienen consecuencias penales".

Revancha

El Observatorio de Bandas Latinas, un órgano perteneciente al Centro de Ayuda Cristiano de Madrid, van aún más lejos. Explican a este diario que "no solamente captan a niños de 11 o 12 años, sino a críos de 9 y 10 años. Estos no suelen ser empleados para atacar, porque son muy pequeños, pero sí para guardar las armas de los mayores en sus casas, en el armario o debajo de la cama. También para transportar la droga de un punto a otro, porque niños tan pequeños van a pasar desapercibidos para la policía. A esos chicos los captan directamente en los colegios".

A la hora de calificar el momento de violencia en el que nos encontramos, su portavoz asegura que "estamos en tiempos de revancha. Las bandas juveniles funcionan como olas. Hay altercados graves, luego una época de supuesta bonanza en la que bajan un poco los incidentes... para volver con más fuerza. Ahora estamos con revanchas de ataques e incluso muertes que se han dado en Madrid en los últimos tiempos".

Las guerras entre bandas latinas empezaron en España allá por el año 2000. Latin Kings y Ñetas fueron los protagonistas de las primeras peleas. Y aunque ambas tienen origen en Madrid, la ciudad que más sucesos registró con estos protagonistas fue Barcelona. Con el tiempo, Madrid se acabó convirtiendo en la plaza más importante para estas bandas y ahora es el lugar, con diferencia, que más incidentes de este tipo sufre.

El crimen de la calle Atocha comenzó con una reyerta entre DDP y Trinitarios / PI

Los sucesores

Los líderes de aquellas primeras bandas acabaron siendo encarcelados. Uno de ellos, un ecuatoriano llamado Eric Velastegui y apodado King Wolverine, fue el fundador de Latin Kings e intentó registrar a su banda como una asociación cultural. Velastegui terminó en prisión por una serie de delitos graves, entre los que se encuentra la violación a una mujer en la Casa de Campo de Madrid. Y aunque permanece entre rejas, en 2023 volvió a ser detenido por la Guardia Civil (dentro de su celda), acusado de seguir dirigiendo a la banda desde dentro del penal gallego de Teixeiro.

No obstante, la presión policial y los vacíos de poder en este tipo de agrupaciones clandestinas permitió que creciesen otras bandas rivales, que son las que ahora se pelean por el territorio. DDP y Trinitarios son ahora las bandas que atraen a los jóvenes. Ambas se disputan varias zonas de Madrid: Usera, Carabanchel, Villaverde y Ciudad Lineal (escenario del último gran suceso) son las plazas más codiciadas.

DDP y Trinitarios coexisten con Forty Two, una banda fundada por dominicanos en Estados Unidos, y Blood, que es la agrupación que aglutina a jóvenes nacidos en Marruecos. Se han dado casos de alianzas efímeras entre algunos de sus miembros para atacar a otras bandas rivales en su zona. Sin embargo, desde el Observatorio advierten de que llegan nuevos actores a la batalla: "Las maras (pandillas) centroamericanas, como la Salvatrucha o la 18, también se están consolidando en nuestro país. Y los Latin Kings se están rearmando de nuevo".

Trinitarios posando enmascarados / PI

Los menores

Dentro de esta guerra soterrada, los menores se están convirtiendo en la avanzadilla de todas las facciones. Según fuentes de la Policía Nacional, la presencia de menores en estas bandas era del 20%. En 2021 ya suponían el 32% de las mismas. En la actualidad conforman el 60% del cuerpo de estas organizaciones criminales. Y subiendo.

"La captación se suele hacer en institutos, parques y canchas deportivas. Pero a los niños de 9 y 10 años los captan directamente en el colegio", insisten desde el Centro de Ayuda Cristiano a EL PERIÓDICO DE ESPAÑA. La membresía suele llevar aparejada la obligación de abonar una cuota a los mayores. "Esto les lleva a cometer hurtos y pequeños atracos. A veces, como son chavales que no disponen de ingresos propios, convalidan esos pagos con alguna 'misión' violenta", añaden desde la Guardia Civil, donde aseguran que "las peleas son tan violentas, que muchos de los miembros llevan armas y torniquetes, por si alguno corre el riesgo de desangrarse de un machetazo".

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Los dos últimos menores fallecidos formaban parte de Trinitarios. Ambos murieron en 2022. En febrero falleció Jaime Guerrero Messousi, madrileño de 15 años que murió de un machetazo en Atocha. Su banda respondió posteriormente matando a un miembro de DDP de 18 años. El último fallecido fue William, un chico dominicano que cumplió 15 años nueve días antes de su asesinato y que fue tiroteado en Villaverde. Una escalada que no cesa, que ha tenido su último episodio esta semana en Ciudad Lineal y que, presumiblemente, tendrá nuevos capítulos en los próximos días.

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