La ciudad que esconde historia en cada uno de sus rincones

Alcalá de Henares está situada en la cuenca del río Henares y está a tiro de piedra de Madrid, a tan solo 31 kilómetros. Es el tercer municipio más poblado de la Comunidad de Madrid, tras la propia capital y Móstoles. 

Su nombre original fue Complutum, del verbo latino “compluere” que significa confluencia de aguas. Y de aquí viene la palabra Complutense, que significa Alcalá de Henares. La Universidad Complutense se llamó así a partir de 1977 e históricamente también es hija de la Universidad de Cisneros. 

De esta época tenemos la Casa Hippolytus, edificio construido entre los siglos III y IV d.C, que formaba una gran finca situada en los suburbios de la ciudad. Era sede de un Colegio de Jóvenes donde se cumplía una función lúdica. Su interior está completamente acondicionado para la visita y podemos ver el impresionante mosaico de los peces.

Se trata de los pocos colegios de jóvenes de la Hispania Romana. Estaba situado en el límite de la ciudad, en una finca con jardines de inspiración oriental. En su recorrido, podemos comprobar cómo se conserva un horno para cocinar, las letrinas e incluso un pozo de aguas minerales, que es rico en contenido de sulfatos (que tendría un uso medicinal).

La importancia de su ubicación geográfica

Al río Henares, o el río de Alcalá, desembocan aguas de ríos en nuestro término municipal, río Torote y arroyo Camarmilla, ambos de la Campiña.

Forma parte del denominado Corredor del Henares (que es un concepto industrial), junto a otras ciudades del área metropolitana de Madrid, Torrejón de Ardoz, San Fernando de Henares y Coslada, y por parte de la provincia de Guadalajara, la propia capital, Alovera y Azuqueca de Henares. 

Un eje residencial, industrial y empresarial de más de 600.000 habitantes que se ha desarrollado urbanísticamente entre la última década del siglo pasado. Uno de los momentos clave de Alcalá de Henares fue después de la Guerra Civil. Se produce un crecimiento poblacional de emigrantes de otras localidades rurales españoles con bajos niveles de industrialización. 

Desde la segunda década de los 2000, se ha estancado el censo de la población y, según el último informe del Instituto Nacional de Estadística (INE) es de 195.649 habitantes. 

Qué ver en Alcalá de Henares

Antonio Marchamalo es desde 1972 autor de innumerables artículos de divulgación histórica y crítica de arte con más de una veintena de publicaciones sobre la historia de Alcalá de Henares. Preguntado por EL PERIÓDICO DE ESPAÑA sobre los puntos históricos que los visitantes no se pueden perder en la ciudad cervantina, Marchamalo no tiene duda. 

Universidad de Alcalá

Reconocida internacionalmente por la entrega anual de los Premios Cervantes, fue fundada en 1944 por el Cardenal Cisneros, y refundada en 1977 a partir de la Universidad Complutense de Madrid. La fachada de la Universidad de Alcalá de Henares es uno de los aspectos que más llama la atención de los visitantes: decorado con formas que son la obra más importante del renacimiento purista de España ideado por Rodrigo Gil de Hontañón.

Es un auténtico museo al aire libre que es imprescindible recorrer para contemplar su importancia histórica y cultural. 

Catedral Magistral de Alcalá de Henares

La Catedral Magistral de los Santos Justo y Pastor, construida sobre el lugar que sufrieron martirio. Los santos Justo y Pastor, que también conocidos como los Santos Niños, nacieron en Alcalá de Henares en 297 y 295 respectivamente, y fallecieron en 304.

Fueron unos mártires hispanorromanos ejecutados en el 304 en la ciudad por orden del prefecto Publio Daciano. La distinción de magistral significa que los canónicos de los cabildos son doctores.

Es, junto a la Iglesia de San Pedro de Lovaina, en Bélgica, las dos iglesias magistrales de Europa. Una visita ineludible por su exterior, sencillo y austero, pero con las paredes con esgrafiados de tipo segoviano. Su interior está dividido en tres naves, con bóvedas de crucería apoyadas sobre pilares fasciculados.

Hospital de Antezana

Uno de los más antiguos de Europa en funcionamiento sin interrupción desde el siglo XVI. Aquí sirvió San Ignacio de Loyola, que fue el fundador de los Jesuitas, y también don Rodrigo, el padre de Miguel de Cervantes. 

Se encuentra junto a la Casa de Cervantes y fue fundado por Luis de Antezana, regidor de la Villa de Guadalajara, y su esposa, Isabel de Guzmán. Ha sido atendido por las monjas de la orden de las Siervas de María hasta el año 2006. Un asilo que, tras mejoras y rehabilitación, ha ampliado su capacidad de 12 a 23 residentes. 

Ermita del Cristo de los Doctrinos

Data del siglo XVI. De arquitectura popular, posee una capilla en la que se contempla la talla del Cristo de los Doctrinos, obra del jesuita Domingo Beltrán. También se puede ver la talla de Nuestra Señora de la Esperanza, imagen cotitular de la Cofradía desde 1945. De madera, tallada por Juan Giner Masegosa, acompaña al Cristo de los Doctrinos en su salida procesional el Jueves Santo. 

Museo Arqueológico y Paleontológico de la Comunidad de Madrid

Este museo está en el Colegio Convento de la Madre de Dios. Dentro hay una colección permanente con fósiles paleontológicos, útiles paleolíticos, neolíticos, vestigios de la Edad de Bronce y la Edad de Hierro, una importantísima colección de época romana y elementos de cultura material de las edades Antigua, Media y Moderna, e incluso llegando a la arqueología de la época industrial. También se realizan exposiciones temporales arqueológicas, paleontológicas e históricas.