MINISTRA DE TRANSPORTES

Raquel Sánchez, la ministra de Transportes que enfrenta una crisis histórica

Exalcaldesa de Gavà y abogada de profesión, así es la ministra al frente de la cartera de Transportes

La ministra de Transporte, Movilidad y Agenda Urbana, Raquel Sánchez Jiménez, durante una comparecencia. / CARLOS LUJÁN

La ministra de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, Raquel Sánchez Jiménez, está en el ojo del huracán desde hace 12 días, cuando comenzó el paro indefinido de transportistas que amenaza con colapsar el país. Antes de este aluvión mediático que la rodea, la ministra mantenía un perfil más bien bajo, desconocido para la mayoría de los ciudadanos, cuando en julio del año pasado sustituyó a José Luis Ábalos al frente de la cartera de Transportes.

Exalcaldesa de Gavà (Barcelona) y abogada de carrera de 46 años, su nombramiento, junto con el de Isabel Rodríguez -ministra de Política Territorial y portavoz del Gobierno-, fue visto como un intento de acercamiento a los gobiernos municipales y de rejuvenecimiento del Ejecutivo. Desde la Moncloa, por su parte, califican la elección como "una apuesta por la agenda ecológica que quiere abordar el Gobierno nacional en los próximos años".

Raquel Sánchez nació en Gavà en 1975, un municipio y ciudad de la provincia de Barcelona; estudió Derecho en la Universidad de Barcelona y se sacó un Máster en Derecho del Trabajo y Seguridad Social por la Universidad Pompeu Fabra. Desde muy temprano militó en el Partido Socialista de Cataluña (PSC), formando parte de su ejecutiva desde noviembre de 2016. Asimismo, desde 2014 hasta su transición al Ministerio de Transportes, ejerció como alcaldesa de la localidad.

Fuera de la política, durante sus primeros años Sánchez ejerció como abogada en Barcelona, primero, y en Castelldefels, después, donde fundó un despacho propio junto con dos compañeros. Esta experiencia, según la ministra, fue lo que "despertó su vocación de servicio público".

Un perfil con vocación social y próximo a Pedro Sánchez

A lo largo de su trayectoria política, Raquel Sánchez ha mostrado una gran inclinación por cuestiones de ámbito social y medioambiental. De hecho, entre 2016 y 2019 fue secretaria de Política de Mujeres del PSC; cargo que cambió en 2019 por la secretaría de Estrategia y Clima.

Como alcaldesa de Gavà, una de sus mayores preocupaciones fue acabar con la prostitución, endureciendo las penas a los clientes y despenalizando a las prostitutas. Asimismo, se involucró en el proyecto urbanístico de Levant de Mar, que buscaba mejorar tanto la conservación del entorno natural como del espacio público, aunque despertó discrepancias entre algunos vecinos y asociaciones ecologistas.

En el debate en torno a la ampliación del aeropuerto del Prat, Sánchez siempre defendió que cualquier intervención debe estar orientada a reducir el impacto acústico sobre los vecinos, ya Gavà es una de las localidades afectadas por el ruido de los aviones.

En las primarias del PSOE de 2017, la por entonces alcaldesa de Gavà mostró su apoyo a Pedro Sánchez, llegando incluso a participar en un mitin del actual presidente del Gobierno. Fue en un acto que tuvo lugar en Viladecans, una ciudad de la comarca del Bajo Llobregat (Barcelona), al que también acudieron el alcalde de esta población y la alcaldesa de Esplugues de Llobregat. 

Un "escudo social" como respuesta a la crisis del transporte

El mayor reto al que ha tenido que hacer frente hasta la fecha la ministra de Transportes es la actual crisis derivada del paro indefinido de transportistas. Desde el principio, Sánchez se ha negado a considerar a los convocantes un interlocutor válido al no contar con la patronal del sector, el Comité Nacional del Transporte por Carretera (CNTC). "Yo no me voy a sentar con un grupo de radicales que están actuando con violencia", afirmó la ministra la semana pasada.

Esta negativa se mantuvo este jueves, cuando Sánchez y otros miembros del Ejecutivo se han reunido con el CNTC para acordar el reparto de ayudas directas a los transportistas que rebajen el precio que pagan por el gasóleo sin contar con la presencia de la plataforma convocante del paro, la cual asegura que mantendrá las protestas a pesar del acuerdo alcanzado.

"Con nosotros no ha hablado nadie, siguen sentándose con la gente equivocada, y siguen ofreciendo migajas y propinas", ha declarado esta mañana el presidente de la plataforma por la defensa del transporte de mercancías por carretera, Manuel Hernández. Finalmente, la ministra ha reculado y ha anunciado que se reunirá esta misma tarde con los transportistas para intentar desbloquear la situación.