El fútbol inglés se llevó otro varapalo en la ida de la Champions. Mientras en el campeonato doméstico el City superaba al Arsenal en un duelo de altos vuelos que permite a los de Guardiola alcanzar a los de Arteta, en el principal torneo de clubes, el Chelsea, como le sucedió el martes al Tottenham contra el Milan, tropezaba 1-0 frente al Borussia Dortmund. El jugador 'número 12' fue fundamental en el Signal Iduna Park, donde valió el tanto de Adeyemi.
El extremo germano agitó la coctelera para convertir una ocasión del Chelsea a la salida de un córner en un contraataque letal. El futbolista del Dortmund recibió en campo propio y arrancó como una locomotora. Se deshizo de Enzo Fernández, el fichaje más caro de la Premier, para después dejar sentado a Kepa con una definición que vale oro.
Hasta entonces, el Chelsea había hecho más méritos en el encuentro, capitaneado por un Joao Félix, que al igual que en el Atlético, adoleció de falta de efectividad. Fue el gran protagonista de las acciones ofensivas de los 'blues' en la primera parte. A la media hora de juego, el luso inició una jugada en combinación con Ziyech que el propio jugador cedido por el club rojiblanco definió. Aunque lo hizo garrafalmente. Solo, la mandó arriba.
Antes del descanso, Joao Félix envió un balón al larguero después de una buena jugada individual a pase de Havertz. Los de Graham Potter siguieron insistiendo. Emre Can salvó en la línea un disparo de Koulibaly. La tecnología consideró que el balón no había traspasado la línea. Convertido en un correcalles, el conjunto alemán resistió y se la jugará en Stamford Bridge con ventaja.
En el otro partido de Champions, el Benfica encarriló la eliminatoria tras vencer 0-2 al Brujas. El primer tanto fue obra de Joao Mario, de penalti. La sentencia tardó en llegar. No lo hizo hasta el 88, cuando David Neres aprovechó un error de Meijer. Media hora antes de los partidos de Champions se jugó otro que podría ser perfectamente una eliminatoria de la máxima competición de clubs.
Primero contra segundo en la Premier. Al inicio del partido en el Emirates, el líder el Arsenal. Al término del encuentro, el Manchester City se marchaba como cabeza de la competición, aunque con un partido más. En el duelo de banquillos españoles, Guardiola superó a Arteta por 1-3.
EL CITY YA ES LÍDER
Los 'citizens' se adelantaron en el marcador con un gol de Kevin De Bruyne, que aprovechó un error garrafal del japonés Tomiyasu. El belga fue eficaz tras una cesión de patio de colegio a Ramsdale. El Arsenal consiguió igualar con un discutido penalti que Ederson cometió sobre Nketiah. Aké había salvado la definición en una línea de gol que atravesó el balón en la siguiente jugada. Buyako Saka no falló desde los once metros para restablecer el empate al borde del descanso.
Era un partido de altos vuelos, donde media lita estaba en juego, a pesar de estar todavía en febrero. Porque este tipo de partidos definen dinámicas. De Bruyne se lo hizo saber a Arteta con un empujón que en el contexto arbitral de LaLiga habría sido sancionado. Puso una marcha más el City y a punto estuvo de forzar un penalti Haaland, rectificado por fuera de juego. Sin embargo, los visitantes se habían adueñado del tempo del partido. Era cuestión de tiempo y ocasiones.
La oportunidad ganadora llegó en el minuto 72, con otro robo magnífico de los aviones celestes. Como si de una coreografía se tratara, un gran pase de Bernardo terminó en los pies de Haaland, que se la cedió a Gündogan, que a su vez la puso en la izquierda para Grealish, que empaló un buen remate. Tomiyasu, que ya había salido en la foto del primer gol, volvió a salir en el 1-2. El androide noruego anotó el tanto de la sentencia tras una jugada de un gran colectivo que ha ido reduciendo la distancia con el Arsenal hasta convertirla en cero.