¿Qué intereses económicos se juega España en Venezuela?

Aunque Venezuela es uno de los países más complejos del mundo para hacer negocios, España sigue teniendo presencia, aunque con un peso en descenso. Ha pasado de ser el cuarto destino inversor español en 2004 a situarse más allá del puesto número 50 en 2021, según los datos del Instituto de Comercio Exterior (Icex).

En las relaciones comerciales, España es el tercer destino de las ventas venezolanas, con un total de 671,5 millones de euros el año pasado, el 11% del total. El primer destino fue EEUU, con el 60% del total; seguido por China, con el 11%, como España. En cuanto a los proveedores, es decir, las importaciones, España fue el séptimo, con 155,8 millones, el 2% del total. Por delante estuvieron China, EEUU, Brasil, Turquía, Argentina y Canadá. Lo que más exporta el estado caribeño es petróleo y derivados y lo que más importa, maquinaria y material eléctrico, así como alimentos y bebidas. El proteccionismo, la inflación y la falta de divisas influyen directamente sobre el comercio.

La calificación crediticia del país por parte de las principales agencias, como Standard & Poor's, Moody's o Fitch es de país en suspensión de pagos, sin solvencia, con una deuda, por tanto, considerada peor que el bono basura. En los últimos años, más que nueva inversión, los volúmenes que mueven las empresas españolas están relacionados con la reinversión de beneficios o su mantenimiento. El ejercicio en ese país está muy supeditado a la devaluación de la moneda y las grandes limitaciones a la repatriación de beneficios.

Las únicas excepciones que en los últimos años han destacado en el país caribeño son tres grandes operaciones de origen español. En 2004, Telefónica aterrizó en Venezuela, con la segunda operadora de telefonía móvil del país. Repsol, por su parte, desembarcó en Venezuela en 1993, con varios activos de gas y crudo gestionados y mantiene su colaboración con con Petróleos de Venezuela. Y la tercera es Mapfre, que llegó en 1997 con la compra de una aseguradora local. Otras empresas presentes son Acciona, Editorial Planeta, Santillana, Elecnor, Adecco o Duro Felguera entre otras.

Flujos de inversión

En el segmento turístico, Meliá Hotels gestiona un hotel de cinco estrellas en el centro de Caracas y Hesperia dos, uno en Valencia y otro en Isla Margarita. Además, IAG y Air Europa ofrecen vuelos directos desde Madrid.

Desde hace años, los flujos de inversión están prácticamente planos. El año pasado, la inversión bruta española fue de 31,78 millones frente a 5,82 millones de la venezolana en España. Hace una década, las inversiones venezolanas en España llegaron a 1.097 millones frente a los 644 millones de las españolas en Venezuela. Y la inversión venezolana en España cuenta con un elevado peso debido a Abanca a través de Banesco; así como las 'family offices' que se dedican a gestionar los patrimonios de familias adineradas y se centran en las inversiones financieras, inmobiliarias y empresariales. Predominaron en España mediante la adquisición inmobiliaria o ‘Golden Visa’, es decir la obtención de visado a cambio de acometer de inversiones en España, algo que el Gobierno quiere eliminar ahora para rebajar la tensión en el sector inmobiliario, ya que afecta a residencias de un mínimo de 500.000 euros.