AGRICULTURA

La producción de almendra en la Región de Murcia, "en una situación agónica"

La sequía, los costes de producción y la avispilla han llevado al límite a los agricultores

Un campo de almendros en el altiplano de la Región de Murcia. / FECOAM

Beatriz Díaz

La grave sequía, el incremento de los costes de producción y la plaga de la avispilla está afectando gravemente a las producciones de almendro en la Región de Murcia, que se encuentran en «una situación agónica» con unas «gravísimas pérdidas de cosecha», ha puesto de relieve este jueves la Federación de Cooperativas Agrarias de Murcia (Fecoam). 

 «Las nueve cooperativas de frutos secos integradas en la Federación de Cooperativas Agrarias de Murcia (FECOAM) esperan una campaña muy complicada debido a los costes de producción que tienen que afrontar, los cuales se ven influenciados por la reducción del volumen de entrada de almendra», han precisado.

Además, los agricultores han visto cómo se adelantaba la campaña debido a la climatología, el invierno cálido que ha precedido a una primavera sin lluvias ha llevado a una maduración temprana de los frutos. Asimismo, «julio ha sido un mes muy seco y muy cálido, lo que ha ocasionado un adelanto en el desarrollo de la almendra», han añadido. 

Los pronósticos preveían en junio una reducción de la producción de almendra del 21% con respecto a la campaña anterior, con un total de 4.200 toneladas de pepita. Finalmente, se esperan volúmenes muy reducidos, por debajo de lo calculado en un principio.

Otro de los grandes males que están afectando a los almendros es la plaga de la avispilla, como ha explicado la coordinadora de departamento técnico de Coag-IR Jumilla, Antonia María Cruz: «Es una plaga, digamos, que se mete en la almendra y se cierra directamente, se hacen borregos y el fruto queda momificado».

 De la misma forma, ha expresado que no existen medidas fitosanitarias efectivas para hacer frente a esta enfermedad, «sobre todo en las plantaciones ecológicas» y que las opciones disponibles «son demasiado costosas». Esto lleva a los agricultores a dejar la plaga en el árbol, lo que ocasiona un gran problema porque «es un reservorio para la campaña siguiente y así es un ciclo que cada vez va en aumento».

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Cruz ha asegurado que algunas zonas de la Región, como aquellas colindantes con Castilla La Mancha, pueden ver mermada su producción hasta en un 30%, por lo que pide medidas para impedir que los productores abandonen sus almendros enfermos.

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