Los inversores han acogido con positivismo el acuerdo comercial de Talgo con Le Train, uno de los mayores operadores privados del país. El fabricante de trenes se ha disparado un 5,6% en Bolsa y en algunos momentos de la mañana incluso ha alcanzado el 7%. Según recoge el comunicado remitido ayer a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), Talgo suministrará 10 trenes de alta velocidad a esta compañía francesa, que ha obtenido licencia para operar en la red ferroviaria de Francia el pasado 24 de diciembre de 2022, aunque también se matiza que "la firma y entrada en vigor del contrato continúa pendiente de la finalización de las negociaciones actualmente en curso". En total, el contrato ascendería a aproximadamente 300 millones de euros.
La construcción de los diez primeros trenes se iniciará en el primer semestre del año actual en la planta de Talgo situada en Rivabellosa (Álava) con el objetivo de entregarlos al cliente a comienzos del 2025. "Se trata de una gran oportunidad para que nuestra empresa despliegue sus conocimientos e innovaciones al norte de los Pirineos", ha declarado el presidente de Patentes Talgo, Carlos Palacio Oriol. En el contrato se incluye la posibilidad de sumar el mantenimiento de los equipos en Francia, así como la creación de una unidad conjunta de investigación y desarrollo en la región de Nueva Aquitania que impulse el avance del ferrocarril.
"El diseño a medida propuesto por Talgo nos permitirá desarrollar una experiencia única para el viajero", ha especificado el director general de Le Train, Alain Getraud, "sobre todo por el transporte a bordo de material de ocio y deportivos, tales como las bicicletas y las tablas de surf". Mediante la explotación de 5 líneas de alta velocidad en el Gran Oeste francés, Le Train dará servicio a 11 destinos para conectar ciudades como Burdeos, Nantes o Angulema.
Se trata de una buena noticia para el grupo español, que aún está recuperando su actividad. Talgo registró en el tercer trimestre de 2022 unos ingresos de 352,2 millones de euros y un Ebitda ajustado de 38,5 millones de euros, ambas cifras por debajo de las anunciadas el año anterior. El 70% de su cartera de pedidos son internacionales, de ahí que la vuelta a los datos vistos antes de la pandemia tarden en llegar.
En el último año, las cuentas del fabricante de trenes se han sustentado en la fabricación de trenes Talgo 230 para la danesa DSB, los trenes diurnos y nocturnos para LOS Ferrocarriles Nacionales de Egipto (ENR) por un importe de 280 millones de euros y la fabricación del ICE-L para la alemana DB. La cartera de pedidos de Talgo se conforma de más de 2.700 millones de euros, de los que 800 millones corresponden a proyectos de fabricación y remodelación que consolidan su nivel de actividad entre 2022 y 2025.